Se abusa de los tópicos en el fútbol. Que si mucho ojo al balón parado. Que si cuidado con la espalda, que tienen gente rápida arriba. Que si el fútbol es cosa de listos. Ya. Todo esto nos suena a galleta china con mensaje de la suerte, algo así como una batería de respuestas predefinidas para los que no se han molestado ni en ver el partido, ni en analizar al rival. Para aquellos que ven el fútbol a través de los ojos del narrador que se lo cuenta. Para los que no tienen ni puta idea de fútbol, en resumen.

El problema del infrafútbol es que cuando crees que lo conoces, que ya vamos camino de los cinco años, va y te pega un baile de realidad. Tú que te creías tan listo te das de bruces con un partido marcado por el juego a balón parado, de donde nacieron los dos goles. Un choque en el que los pillos fueron determinantes en las dos acciones clave del encuentro y donde los balones a la espalda de los laterales fueron fundamentales para generar faltas, córners y peligro con los hombres rápidos de cada equipo. A veces el juego parece simple, por mucha ciencia que le queramos infundir.

El Deportiva salió espoleado por su victoria contra el San Fulgencio y entendió qué tenía que hacer en cada momento. Aguantar la sacudida inicial del Cox, no consentir segundas jugadas en la frontal del área propia y ganar los máximos duelos divididos en el centro del campo que pudiera. Y lo hizo. El Deportiva se apoyó en dos de sus hombres más inspirados con el balón, Fabián y Samu, para cimentar el trabajo defensivo. Cuando los buenos se remangan, el equipo lo agradece. Aunque lo que de verdad agradece el equipo es que los buenos se busquen y jueguen. Y jugaron.

Las combinaciones entre Rosendo, Fabián y Samu enviaron un mensaje que reinvindicó al Deportiva en una liga que empieza a hacerle justicia. Los cojenses no fueron capaces de alterar su plan inicial de juego directo a la espalda de los laterales oriolanos.

Ambos equipos dispusieron de buenas ocasiones, como el cabezazo al larguero del Deportiva a la salida de un córner. Pero fue en una de esas jugadas de listos con la que se adelantó el CFP a través de dos tipos que se compenetran con solo mirarse. Rosendo botó una falta que parecía inofensiva a 40 metros de la portería. Samu Guerrero, con la defensa del Cox mal colocada hizo la de Origi en medio del desconcierto. Se plantó en el área del Cox y batió al arquero con un gran chut cruzado (0-1).

Así se llegó al descanso, aunque la ventaja duraría poco. A los 3 minutos de la reanudación, el CD Cox aprovechó una falta lateral cerca del pico izquierdo del área para empatar con un lanzamiento directo por el primer palo (1-1).

Balón parado, pillería, balón directo y que luzca la gente rápida. Todo eso que ya nos sabíamos, en teoría. Los tópicos de siempre encarnados en un partido que los dos querían ganar y que, sobre todo, ninguno quería perder. El Deportiva, que fue superior, buscó el segundo con cambios ofensivos y una gran actitud. El CD Cox pudo llevarse el partido a la contra, pero no fue capaz de concretar frente a León. El choque terminó con un punto para cada uno y con el Deportiva en una de sus mejores versiones desde que comenzó la temporada.

Por parte del CFP Orihuela Deportiva lucharon: León; Víctor Jara, Hamza, Libu (Belmonte), Abel (Espadas); Hassan, Rosendo, Fabián; Roque (Jorge Sánchez), Samu Guerrero (Mario) y Andrés. Entrenador: César Álvarez

Goles: 0-1 Samu Guerrero

Partido a puerta cerrada en el San Fernando de Cox

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